lunes, 25 de agosto de 2014

La marca personal (estesoyyo marca registrada)

¡Hola a todos!
Debido a un comentario (guiño, guiño) en la entrada de hace un par de semanas en la que se mencionaba el personal branding, he decidido empezar a tocar este tema, intercalándolo con otros que teníamos pendientes (al final, todo está relacionado, además, espero que así os aburráis algo menos...)

El mundo en el que vivimos está dominado por las marcas (de ropa, supermercado o de champú) con lo que sólo era cuestión de tiempo que alcanzara a las personas. Si no me equivoco, en la convocatoria FIR de 2013 se ofertaron 139 plazas de Farmacia Hospitalaria, así que, cuando terminéis la residencia, habrá más de un centenar de personas con las que competir por un puesto de trabajo y cuyas diferencias en el currículum serán mínimas, por lo tanto, el marketing personal ha dejado de ser una opción para convertirse en una necesidad. 

LAS COSAS CLARAS Y EL CHOCOLATE ESPESO

Antes de adentrarnos por completo en este mundo, conviene conocer un par de conceptos:

MARCA: según la RAE, marca es una señal que diferencia una persona, animal o cosa de otras similares. Hoy en día, el concepto de marca también engloba cierta garantía de calidad (escogemos esta marca o aquella porque la consideramos mejor que la otra). La marca es uno de los motivos que llevan al consumidor a escoger un producto frente a otros del mismo tipo.

Aplicando este concepto a las personas, surge el término de MARCA PERSONAL, que sería todo aquello que define a una persona concreta, por lo que se la reconoce y se la diferencia del resto. El nombre de nuestra marca sería nuestro propio nombre y nuestro logotipo sería nuestro aspecto (nada más gráfico que Lady Gaga como ejemplo...)

Por otra parte, la IMAGEN (en el ámbito del marketing) sería la representación que formamos en nuestra mente de algo o de alguien, mientras que la REPUTACIÓN (ya sea buena o mala) es la opinión  que tenemos de ese algo o alguien.

¿POR DÓNDE EMPEZAR?

Debemos tener en cuenta que en esto del personal branding nunca se empieza desde cero, todos tenemos una personalidad más o menos definida, un estilo a la hora de vestir y de peinarnos... que ya ha empezado a generar imágenes y opiniones en los que nos rodean; por lo que de lo que se va a tratar todo esto es de generar las señales adecuadas para modificar la imagen que tienen de nosotros y ganarnos una buena reputación.

Pero, ¿qué aspectos son susceptibles de modificarse para mejorar nuestra marca personal?. A grandes rasgos serían:

1) Nuestro aspecto.
2) Nuestro comportamiento.
3) Los mensajes que emitimos.
4) Nuestra presencia en las redes sociales.
5) Nuestra presencia en internet.
6) Nuestro networking.




lunes, 18 de agosto de 2014

Mejorando nuestra asertividad I: conócete a ti mismo

Hace un mes (más o menos) os hablé de la asertividad como ese comportamiento que todos queremos alcanzar. La verdad es que esa entrada prometía el oro y el moro pero se quedó sólo en una introducción de los tipos de comportamientos que existían y no os di ninguna pista de cómo mejorarla.

Como el tema puede ser muy laaaargo, la idea es dividirlo en 3 ó 4 entradas, así que hoy empezaremos por conocernos a nosotros mismos, para tener un punto de partida sobre el que trabajar. Si sabemos en qué situaciones nos comportamos de una manera que no consideramos adecuada (por agresiva o por pasiva) cuando se repitan, identificaremos cómo reaccionamos y será más fácil modificar ese comportamiento.

RECOPILACIÓN DE INFORMACIÓN

Antes de seguir leyendo, primero debéis preguntaros si queréis cambiar ese comportamiento, ya que, si estáis plenamente contentos con como sois, no deberíais cambiar. Si la respuesta es un sí, coged un folio y divididlo en 7 columnas (mejor en apaisado, que en algunas hay que rellenar bastante....) con los siguientes encabezados:

1) ¿Qué situación?: aquí ponéis las situaciones que os parecen un problema. Por ejemplo: "no sé mantener una discusión civilizada" o "no sé cómo pedir que me devuelvan dinero que he prestado"....cada uno las suyas.

2) ¿Con quién?: por lo general, estas situaciones son diferentes dependiendo de la persona con la que se produzcan: si la discusión es con el jefe, probablemente nos comportemos de una forma menos agresiva o más pasiva que lo que lo haríamos con un amigo o un familiar.

3) ¿Cuándo ocurre?: momento y lugar en la que se produce esa situación (en el trabajo, en casa, con los amigos....)

4) ¿Qué es lo que me preocupa de esa situación?: si nos preocupa lo que piensen de nosotros, si nuestra respuesta en ese momento tendrá alguna repercusión...

5) ¿Cómo lo suelo afrontar normalmente?: ¿nos comportamos de forma tímida o agresiva?,¿gritamos?, ¿lloramos?...

6) ¿De qué tengo miedo si soy asertivo?: podemos pensar que no queremos cambiar nuestra conducta por diversos temores, por ejemplo, si somos tímidos, el comportarnos de una forma más asertiva puede hacer que pensemos que nuestro jefe tenga un mal concepto de nosotros, que protestamos mucho, etc.

7) ¿Cuál es el objetivo de ser más asertivo en esta situación?: cada uno tendrá los suyos (que se le valore más profesionalmente, no ceder contínuamente...) 

ANÁLISIS DE RESULTADOS

Una vez que ya tenemos rellena la tabla, cada situación debe analizarse por separado. No sé cuántas situaciones os habrán salido a cada uno, pero, dado que no podemos hacer un cambio drástico, no debemos analizar toda la tabla de golpe, sino una o dos situaciones por semana (tampoco queremos que se nos eternice el cambio...)

Para el análisis de cada situación, cogeremos otro folio, como título ponemos el problema y pintamos tres círculos grandes. Cada uno de ellos lo completaremos con:

1) ¿Qué pienso?: aquí ponemos qué es lo que pensamos en esa situación.

2) ¿Cómo actúo?: qué comportamiento mostramos y transmitimos (me pongo rojo, chillo, lloro, sudo, tartamudeo, tengo taquicardias, siento que me voy a marear...)

3) ¿Qué es lo que siento?: si sentimos nervios, ira, enfado, angustia, pena, vergüenza....


Esto en principio no parece mucho, pero sí que tiene utilidad (o eso espero) porque este análisis nos hace tomar conciencia objetiva de lo que nos pasa, de forma que cuando nos volvemos a enfrentar a esas situaciones, sabemos qué es lo que no nos gusta de ellas y queremos cambiar.








lunes, 11 de agosto de 2014

El primer día, las etiquetas y cómo causar buena impresión

Bienvenidos a vuestro primer día de los próximos 4 años de vuestra vida; o a cada rotación por servicios clínicos de R4; o a vuestro primer día como Especialista. A nivel emocional es un día raruno: por una parte estamos ilusionados, es una experiencia nueva, nos hemos preparado para ello y tenemos ganas de que empiece; pero, por otro, tenemos algo de miedo y estamos un poco nerviosos (es lo que tiene lo "desconocido").

La mayoría de las personas no somos conscientes (hasta hoy, que espero que esto sirva de algo) de lo importantísimo que es este primer día (o días, semanas o primer mes) para establecer una buena relación con nuestros nuevos compañeros de trabajo, ya que si se empieza con un tropezón, suele ser bastante difícil corregir esta dinámica.

Las primeras impresiones se generan a la velocidad de la luz; diversos estudios de campo revelan que este proceso puede darse en el primer mes de trabajo e incluso en la primera semana. El problema que tiene este primer etiquetado es que suele ser duradero y acaba confirmándose, siendo muy difícil cambiarlo, ya que existen mecanismos que refuerzan esta situación.

Esta fase de prejuzgar o juzgar rápidamente a las personas tiene una gran influencia, pudiendo afectar tanto a las relaciones interpersonales como al rendimiento de la plantilla. No sólo sorprende el alcance que puede tener el etiquetado, sino la rapidez con la que se producen sus consecuencias negativas.

Ya sé que todo lo que os he contado hasta ahora puede resultar bastante desalentador pero no quiero que os desaniméis, las etiquetas son duraderas, no permanentes, se pueden cambiar, aunque, para no mentiros, es más difícil; así que os dejo una infografía con consejos para empezar con buen pie.

Para descargar el archivo en pdf, pincha aquí.


martes, 5 de agosto de 2014

Brainstorming (la lluvia o tormenta de ideas)

Ya sé que es martes, vengo con un poco de retraso, debe ser que de vacaciones da algo más de pereza esto de escribir....jejeje.

Hoy os voy a hablar sobre una técnica de generación de ideas en grupo, el BRAINSTORMING. Muchos de vosotros habréis oído hablar de ello, otros lo conoceréis y algunos lo habréis puesto en práctica, así que el objetivo de esta entrada es que sea un poco para todos los públicos.

Brainstorming o lluvia o tormenta de ideas es una herramienta de generación de ideas en grupo desarrollada en los años 30 por Alex Osborn y que se publicó en el libro "Applied Imagination". Esta herramienta se basa en la hipótesis de que en grupo se generan más y mejores ideas que la suma de cada individuo por separado.

REGLAS DEL JUEGO

La técnica tiene cuatro reglas fundamentales:

1) NADA DE PREJUZGAR: esta es la norma principal. No se permiten las críticas en el momento de la generación de ideas.

2) Toda idea es BIENVENIDA: el objetivo es generar el mayor número de ideas posible, sin importar (a priori) la calidad de las mismas.

3) CANTIDAD más que calidad: lo principal, como ya os he dicho, es genererar a chorrón, la evaluación vendrá después.

4) UNIR LOS PUNTOS: también deben aceptarse ideas que conectan entre sí, o el desarrollo de una idea mencionada anteriormente.

MATERIAL

Para empezar a trabajar necesitamos:

1) Sala amplia, iluminada y ventilada (ni frío ni calor), si ya estuviera fuera del lugar habitual de trabajo sería lo más de lo más.

2) Sillas cómodas (ojo, he dicho silla, no butaca, que luego la gente se duerme y no sacamos nada en claro...).

3) Material para apuntar: esto es al gusto del consumidor, yo soy más de libreta chula y bolis de colores, pero los más tecnológicos pueden llevarse su smartphone o tablet. A veces, está bien utilizar pizarra o un proyector, siempre y cuando esto no enlentezca el proceso e incluso una grabadora (aunque esto último puede cohibir a los participantes si no están acostumbrados a ser grabados).

4) Participantes: para que el proceso sea lo más productivo posible, los participantes deberían ser elegidos. En la medida de lo posible, tenemos que dejar fuera de la convocatoria todas aquellas personas negativas, críticas, y con poco gusto por el trabajo en equipo y la participación (¡cenizos fuera!).

5) Un conductor: será el encargado de poner un poco de orden en toda esta vorágine. No tiene porqué ser la misma persona que convoca la reunión, sino que debe ser una persona con capacidad de liderazgo y dinamizadora.

6) Un secretario que tomará nota de cuanto ocurre en la reunión y apuntará todas las ideas que vayan surgiendo.

ETAPAS

1) CALENTAMIENTO: para empezar, hay que despertar un poco la mente. Se pueden utilizar ejercicios de asociación rápida, como por ejemplo continuar cadenas de palabras (paTO, TOmaTE, TErreNO, NOciVO....) o preguntas como "cosas que se encuentran en la playa", "medicamentos que empiecen por B"...

2) GENERACIÓN DE IDEAS: antes de empezar debemos definir un número aproximado de ideas al que queremos llegar y el tiempo durante el cual vamos a trabajar.

3) TRABAJO CON LAS IDEAS: una vez generado un número considerable de ideas, puede trabajarse un poco con las mismas para pulirlas o modificarlas un poco. Para este punto se puede utilizar la técnica SCAMPER que consiste en aplicar a las ideas generadas las preguntas ¿Sustituir?, ¿Combinar?, ¿Adaptar?, ¿Modificar?, ¿utilizar Para otros usos? ¿Eliminar o reducir? y ¿Reordenar?.

4) DESARROLLO INDIVIDUAL Y/O EN PEQUEÑOS GRUPOS: Ya con las ideas definidas, se debe reducir el número para después trabajar individualmente con ellas, esto se puede hacer por votación. Una vez concluida esta primera reunión, se desarrollarán algo más las ideas más votadas, para después ser evaluadas.

5) VALORACIÓN: deben definirse los criterios de evaluación de las ideas desarrolladas. En esta segunda reunión se expondrán las mismas y se evaluarán por los participantes, intentando llegar a la solución óptima.


En esto consiste una lluvia de ideas, breve y analógicamente. Para los más informatizados, os comento que existe software para brainstorming como Brainstorming Bungy (en este se anotan las ideas en forma de post-its para luego ser evaluadas según los criterios que establezcáis) que podéis probar con su versión gratuita de 30 días y herramientas online como bubbl.us (tiene versión gratuita y de pago, pero en todos los casos se requiere registro).